• Soliveres: “Lo más emocionante era saber que mi padre estaba allí a cada manga y poder ganar con él acompañándome fue algo muy especial

El bodyboard español es un de los más fuertes a nivel mundial, prueba de ello es el reciente título de campeón del mundo junior que acaba de conquistar Armide Soliveres.

Este joven canario acaba de hacer historia y en apenas dos meses ha logrado conquistar el título individual europeo, en el campeonato de selecciones nacionales que se disputó en Santa Cruz, y el título de campeón mundial pro junior que acaba de lograr en Viana do Castelo. 

El país luso parece traerle suerte al joven Armide que sus dos medallas de oro se las colgó allí. Dos viajes que nos confesó increíbles y con un nuevo objetivo, alzarse con el título nacional más importante de bodyboard, el Campeonato de España. 

¿Cómo te sientes después de haber ganado el circuito mundial?

La verdad que fue una alegría increíble el momento en el que supe que era campeón. Lo más emocionante era saber que mi padre estaba allí a cada manga y poder ganar con él acompañándome, fue algo muy especial. Escuchar a mis padres todo el rato “vamos hijo que tú puedes o para nosotros ya eres el mejor” fue algo inolvidable.

La última manga, la que te hizo campeón, ¿cómo fue esa final?

Al principio de la manga tuve dos olas que no fueron muy buenas. Pero, al remontar me fijé que había un pico algo más hacia la derecha e intente ir rápido hacia él. Un minuto después, entró la ola en la que hice el nueve que sumado a otra buena ola que tenía me dio la victoria en la final.

Este año solo hubo una prueba, ¿cómo fue este campeonato del mundo junior?

La prueba se disputó en Viana do Castelo, en la playa de Agra, y venían los mejores bodyboarders junior del mundo porque este año se realizó a esta única prueba. La verdad, allí estaban todos los buenos, había un montón de los que sigo en redes y no me esperaba que hubiese tantísimo nivel.

Fuisteis varias familias desde Canarias, ¿cómo fue ese viaje?

¡El viaje fue un viaje muy divertido! Fuimos 5 familias juntas en las que en todas había un competidor. Todos hicimos buenos resultados y había muy buen ambiente. Otra vez, Javi Domínguez y yo hicimos un gran campeonato, Javi quedó tercero y yo tuve la suerte de ganar, así que: ¡un viajazo en todos los sentidos!

¿Cómo fueron las olas durante el campeonato?

Las olas fueron impresionantes, súper grandes y muy buenas. No había nada de viento y las olas te dejaban hacer diferentes maniobras en cada una.

¿Cuál crees que fue la diferencia que marcaste para lograr llevarte el título?

Mi ventaja creo que en este campeonato fue que yo voy bien tanto en las olas de derechas como las de izquierdas. Cuando se ponían las olas mejor de un lado que de otro había muchos competidores a los que les era más difícil pasar la manga. Sin embargo, yo puedo ir bien en ambas y creo que eso me ayudó.

Hace unos meses te proclamaste también campeón de Europa en Santa Cruz, ¿por qué está siendo tan especial este año?

Este año estoy más centrado en los entrenamientos y he conseguido mejorar mucho más rápido que en otros años,  esto creo que ha sido la clave para lograr estos dos títulos.

Después de esta gran temporada, ¿cuáles son tus próximos objetivos y retos?

Mi objetivo más a corto plazo es conseguir ganar en el campeonato de España a finales de noviembre en Canarias y para el año que viene intentar mantener lo conseguido este año. 

Además, quiero seguir dando lo máximo para poder estar ahí arriba, ver si tengo suerte y puedo tener algún patrocinador que me ayude a realizar más pruebas por todo el mundo.

¿Cómo ha cambiado tu día a día tras lograr el campeonato del mundo?

La verdad que al conseguir este título hay mucha más gente que me saluda y dice: “mira, ese es el campeón del mundo”. Yo sigo igual, me hace ilusión, pero sé que del bodyboard no es un deporte del que se pueda vivir.

Ya para cerrar la entrevista, ¿cómo está actualmente el bodyboard?

Aquí en Canarias la verdad que está bastante bien. Hay gente muy buena, sobre todo los que venimos por debajo, que estamos a tope y con ganas de seguir mucho tiempo.